martes, 11 de septiembre de 2007

Falsos iconos

Edificio CONATEL, Caracas


En memoria del 11 de septiembre de 1973 y del 2001 (Fin de un sueño.)


En países que buscan encausarse por el carril del desarrollo humano la preservación de la libertad es cuestión de lucha diaria. Aunque pensándolo mejor, hasta en los países con democracias aventajadas en el tiempo, la libertad está igualmente amenazada como en otros países -con regimenes democráticos avalados por la saña del voto- cuales se deslizan lentamente en la cloaca del populismo y del caudillismo económico y militar.

En los países menos desarrollados socialmente la lucha por la preservación de las libertades es descarnada. Habiéndoseles ido a sus pueblos la dicha de una vida mejor, la preservación de las libertades es la esperanza de que algún día se pueda recobrar lo perdido en la ilusión. Observar cómo la libertad está asociada falazmente a iconos estadounidenses, cuando han sido éstos, quienes se han rendido a dar la lucha para la preservación de la libertad (de prensa y de otras libertades), al practicar el silencio de la verdad y condescender a la alabanza de un sistema político corrompido al servicio de una aberrante ideología política, es mal augurio –por ahora- el resultado de este conflicto.

Pero hay –pienso yo- todavía ilusión en la vigencia de la democracia en el corazón del pueblo venezolano: al dar la batalla por las libertades. Aunque se aferren a iconos de antaño que hoy en día han sido infaustamente sobrepasados por la realidad. Ahora tendrán que dar la batalla como soldados individuales y crear nuevos símbolos propios que representen la lucha por la libertad. Les deseo –y me deseo (a pesar de mi egoista lejanía)- el mejor de los éxitos.